Con los almendros en flor antes de tiempo parece que llega la primavera pronto. Es la primera sin ti, la primera de tantas que vendrán, otro comienzo que tenemos que tragarnos fuerte sin que estés a nuestro lado. Miro el calendario de reojo cada día, y el 19 de marzo me acecha tras el final de cada jornada, recordándote al cuadrado.
Un nuevo cambio horario, al de verano esta vez, un nuevo inicio, otra cosa nueva que nos pasa, que tenemos que vivir y afrontar sin tu guía y apoyo. Cada vez que me paro a pensar todo lo que te estás perdiendo, todo lo que te perderás, me siento huérfana de ti otra vez, voy caminando coja en el alma sin rehabilitación que me sane.
Te llevo cerquita del corazón, te llevo tan adentro que me parece mentira que te hayas ido, y la injusticia de esa realidad me incendia contra todo a mi alrededor. A veces pienso que sería lo más fácil, prenderle fuego a la vida y dejarme ir.
Imagen de Kanenori en Pixabay
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Cafés para el alma 
No te lo digo nunca, pero me gusta mucho el formato que le das a tu blog y esa valentía que tienes para abrirte en palabras. Ojalá sigas así mucho tiempo. Besos.
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Muchas gracias Tony 💜
A veces va de mi, muchas, otras no tanto, pero siempre he creído que de lo que mejor se escribe es de lo que uno conoce. Un gran abrazo 🤗
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