De lunes a domingo, el trabajo marinero no duerme. Desde siempre, el mar reclama para sí tu vida y la de tu familia, manteniendo penosamente a flotae la maltrecha economía familiar siempre a expensas de sus cambios de humor y de su cómplice climatológico.
Y es que ya se sabe que se dice: el mar aprieta pero no ahoga, salvo cuando te traga para siempre.
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Gracias Andrea, cada año el mar se cobra un tributo en vidas, a pesar de los avances técnicos que esquilman las especies y protegen a los marineros. Un beso.
Creo que hay una errata en a flote.
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Errata corregida, gracias Carlos😘
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Un oficio muy duro, desde luego. Saludos!
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Sin duda…
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