Por la ventanilla asoma una primavera inesperada que anima la vida. Es el momento perfecto para dejar atrás la ciudad y con ella todas las nubes oscuras que me persiguen. Es aquí, en este momento estando contigo mientas conduces a mi justo a mi lado cuando por fin puedo volver a respirar.
Con las manos en el volante, tamborileas suave al ritmo del rock que suena fuerte por los altavoces. De vez en cuando cantas una estrofa seguida del estribillo, medio avergonzado y mirándome de reojo, no vaya a ser que me ría.
– ¿A cuánto has dicho que está ese sitio al que quieres ir?- preguntas después de un rato.
– Como hora y media…- respondo a media voz.
Aunque por esta sensación podríamos viajar sin rumbo toda la vida.
Cafés para el alma de Andrea Rodríguez Naveira está sujeto a Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Cafés para el alma 
Ese es un momento mágico, una canción conocida y un largo camino por delante. Un beso.
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De esos con luz propia 😊
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